Los jabones hechos a mano han ganado una inmensa popularidad debido a sus ingredientes naturales y propiedades que aman la piel. Entre los diversos tipos, el jabón de caléndula se destaca como una opción deliciosa, aprovechando los beneficios de las flores de caléndula (Calendula officinalis), conocidas por sus cualidades curativas y calmantes.
Los beneficios de la caléndula
La caléndula es venerada en la medicina herbal por sus propiedades antiinflamatorias, antisépticas y curativas. Los vibrantes pétalos de color naranja no solo son visualmente atractivos; hacen maravillas para la piel. El jabón de caléndula es particularmente beneficioso para:
1. Limpieza suave: a diferencia de los jabones comerciales que pueden eliminar los aceites naturales, el jabón de caléndula ofrece un efecto de limpieza suave sin resecar la piel.
2. Irritaciones calmantes: ideal para pieles sensibles, puede ayudar a aliviar afecciones como el eczema, la dermatitis y el acné.
3. Promover la curación: Las propiedades antibacterianas naturales pueden ayudar a curar cortes menores, moretones y quemaduras.
La caléndula tiene propiedades descongestivas, antiinflamatorias, cicatrizantes y tonificantes y su uso está recomendado en las inflamaciones de la piel
El jabón hecho con este aceite mejora la piel seca, agrietada y escamada, a la vez que nutre y protege la piel, por lo que está recomendado para todo tipo de piel y especialmente la delicada piel de los niños.
¡Que disfrutes haciendo espuma! 🧼✨
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